11.1 ¿Qué es la Personalidad?
La personalidad se ha estudiado desde hace más de 2,000 años, comenzando por Hipócrates. Se han propuesto teorías más recientes de la personalidad, incluyendo la perspectiva psicodinámica de Freud, que sostiene que la personalidad se forma a través de experiencias de la primera infancia. Luego surgieron otras perspectivas en reacción a la perspectiva psicodinámica, incluyendo las perspectivas de aprendizaje, humanista, biológica, rasgo y cultural.
11.2 Freud y la perspectiva psicodinámica
Sigmund Freud presentó la primera teoría integral de la personalidad. También fue el primero en reconocer que gran parte de nuestra vida mental tiene lugar fuera de nuestra conciencia consciente. Freud también propuso tres componentes a nuestra personalidad: el id, el ego y el superego. El trabajo del ego es equilibrar las impulsiones sexuales y agresivas del id con el ideal moral del superego. Freud también dijo que la personalidad se desarrolla a través de una serie de etapas psicosexuales. En cada etapa, el placer se centra en una zona erógena específica. No resolver una etapa puede llevar a uno a quedar obsesionado en esa etapa, lo que lleva a rasgos de personalidad poco saludables. La resolución exitosa de las etapas conduce a un adulto sano.
11.3 Neo-freudianos: Adler, Erikson, Jung y Horney
Los neo-freudianos eran psicólogos cuyo trabajo seguía del de Freud, generalmente coincidieron con Freud en que las experiencias infantiles importan, pero disminuyeron el énfasis en el sexo y se enfocaron más en el entorno social y los efectos de la cultura en la personalidad. Algunos de los neo-freudianos notables son Alfred Adler, Carl Jung, Erik Erikson y Karen Horney. Los enfoques neo-freudianos han sido criticados, porque tienden a ser filosóficos más que basados en investigaciones científicas sólidas. Por ejemplo, las conclusiones de Jung sobre la existencia del inconsciente colectivo se basan en mitos, leyendas, sueños y arte. Además, al igual que con la teoría psicoanalítica de Freud, los neo-freudianos basaron gran parte de sus teorías de la personalidad en información de sus pacientes.
11.4 Enfoques de aprendizaje
Los teóricos del comportamiento ven la personalidad como significativamente conformada e impactada por los refuerzos y consecuencias fuera del organismo. Las personas se comportan de manera consistente con base en el aprendizaje previo. B. F. Skinner, un destacado conductista, dijo que demostramos patrones de comportamiento consistentes, porque hemos desarrollado ciertas tendencias de respuesta. Mischel se centró en cómo los objetivos personales juegan un papel en el proceso de autorregulación. Albert Bandura dijo que el entorno de uno puede determinar el comportamiento, pero al mismo tiempo, las personas pueden influir en el ambiente tanto con sus pensamientos como con sus comportamientos, lo que se conoce como determinismo recíproco. Bandura también enfatizó cómo aprendemos viendo a los demás. Consideró que este tipo de aprendizaje también juega un papel en el desarrollo de nuestra personalidad. Bandura discutió el concepto de autoeficacia, que es nuestro nivel de confianza en nuestras propias habilidades. Finalmente, Rotter propuso el concepto de locus de control, que hace referencia a nuestras creencias sobre el poder que tenemos sobre nuestras vidas. Dijo que las personas caen a lo largo de un continuo entre un locus de control puramente interno y uno puramente externo.
11.5 Enfoques humanísticos
Los psicólogos humanistas Abraham Maslow y Carl Rogers se centraron en el potencial de crecimiento de individuos sanos. Creían que las personas se esfuerzan por llegar a ser autoactualizadas. Tanto las teorías de Rogers como las de Maslow contribuyeron enormemente a nuestra comprensión del yo. Enfatizaron el libre albedrío y autodeterminación, con cada individuo deseando convertirse en la mejor persona en la que puedan llegar a ser.
11.6 Enfoques biológicos
Algunos aspectos de nuestras personalidades están controlados en gran medida por la genética; sin embargo, los factores ambientales (como las interacciones familiares) y la maduración pueden afectar las formas en que se expresan las personalidades de los niños.
11.7 Teóricos del rasgo
Los teóricos del rasgo intentan explicar nuestra personalidad identificando nuestras características estables y formas de comportarse. Han identificado importantes dimensiones de la personalidad. El Modelo de Cinco Factores es la teoría más aceptada en la actualidad. Los cinco factores son apertura, escrupulosidad, extroversión, amabilidad y neuroticismo. Estos factores ocurren a lo largo de un continuo.
11.8 Comprensiones culturales de la personalidad
La cultura en la que vives es uno de los factores ambientales más importantes que da forma a tu personalidad. Las ideas occidentales sobre la personalidad pueden no ser aplicables a otras culturas. De hecho, hay evidencia de que la fuerza de los rasgos de personalidad varía según las culturas. Las culturas individualistas y las culturas colectivistas ponen énfasis en diferentes valores básicos. Las personas que viven en culturas individualistas tienden a creer que la independencia, la competencia y el logro personal son importantes. Las personas que viven en culturas colectivistas valoran la armonía social, el respeto y las necesidades grupales sobre las necesidades individuales. Existen tres enfoques que pueden ser utilizados para estudiar la personalidad en un contexto cultural: el enfoque cultural-comparativo, el enfoque indígena y el enfoque combinado, que incorpora ambos elementos de ambas visiones.
11.9 Evaluación de la personalidad
Las pruebas de personalidad son técnicas diseñadas para medir la propia personalidad. Se utilizan para diagnosticar problemas psicológicos así como para seleccionar candidatos para la universidad y el empleo. Existen dos tipos de pruebas de personalidad: los inventarios de autoinforme y las pruebas proyectivas. El MMPI es uno de los inventarios de autoreporte más comunes. Hace una serie de preguntas verdaderas/falsas que están diseñadas para proporcionar un perfil clínico de un individuo. Las pruebas proyectivas utilizan imágenes ambiguas u otros estímulos ambiguos para evaluar los miedos, deseos y desafíos inconscientes de un individuo. La prueba de transferencia de tinta de Rorschach, el TAT, el RISB y el C-TCB son todas formas de pruebas proyectivas.