Por otro lado, dado que la mayoría de los niños con un TEA no reciben su diagnóstico formal hasta los 4 años o más, los años de preescolar y jardín de infancia suelen ser la primera oportunidad real d...Por otro lado, dado que la mayoría de los niños con un TEA no reciben su diagnóstico formal hasta los 4 años o más, los años de preescolar y jardín de infancia suelen ser la primera oportunidad real de implementar servicios formales de educación especial en el entorno de un aula inclusiva.[1]