Cada vez más educadores, profesionales de la salud y de la salud mental, y otros defensores de los niños coinciden en que esta tendencia afecta de forma negativa a la salud y al desarrollo de los niño...Cada vez más educadores, profesionales de la salud y de la salud mental, y otros defensores de los niños coinciden en que esta tendencia afecta de forma negativa a la salud y al desarrollo de los niños pequeños. En un entorno exterior, la capacidad cognitiva de los niños para apreciar la belleza, expresarse de forma creativa y percibir los patrones sensoriales y la variedad se amplía hasta alcanzar nuevos niveles (Torquati & Barber, 2005).[1]