El don de la imaginería poética acompaña a la realización de que uno puede aventurarse más allá de los confines del refugio y regresar a él libremente, de manera que los movimientos de entrar y salir,...El don de la imaginería poética acompaña a la realización de que uno puede aventurarse más allá de los confines del refugio y regresar a él libremente, de manera que los movimientos de entrar y salir, girar y regresar, se vuelven simbólicamente análogos a un acto de hacer el amor.