En el ámbito político, Jaime I y su sucesor Carlos I insistieron en el derecho divino de los reyes —la creencia de que los reyes fueron elegidos por Dios y no respondían a nadie más que a Dios, teoría...En el ámbito político, Jaime I y su sucesor Carlos I insistieron en el derecho divino de los reyes —la creencia de que los reyes fueron elegidos por Dios y no respondían a nadie más que a Dios, teoría que incluía el derecho del monarca a gobernar sin intervención parlamentaria.