Ni un eco latente en la casa, ni un chillido y una pelea de los ratones detrás de los paneles, ni un goteo del pico de agua medio descongelado en el aburrido patio de atrás, ni un suspiro entre las ra...Ni un eco latente en la casa, ni un chillido y una pelea de los ratones detrás de los paneles, ni un goteo del pico de agua medio descongelado en el aburrido patio de atrás, ni un suspiro entre las ramas sin hojas de un álamo abatido, ni el balanceo ocioso de una puerta vacía de una tienda-casa, no, ni un chasquido en el fuego, sino cayó sobre el corazón de Scrooge con una influencia suavizante, y le dio un paso más libre a sus lágrimas.