“Ella no está sola, y en esos momentos no es una niña: es una anciana, anciana”. Escaneé toda la orilla visible mientras la señora Grose volvía a tomar, en el elemento queer que le ofrecí, uno de sus ...“Ella no está sola, y en esos momentos no es una niña: es una anciana, anciana”. Escaneé toda la orilla visible mientras la señora Grose volvía a tomar, en el elemento queer que le ofrecí, uno de sus hundimientos de sumisión; después señalé que la embarcación podría estar perfectamente en un pequeño refugio formado por uno de los recesos de la piscina, una muesca enmascarada, para el lado de acá, por una proyección del banco y por un grupo de árboles que crecen cerca del agua.