Dijo que vinimos aquí únicamente por mi cuenta, que iba a tener un descanso perfecto y todo el aire que pudiera conseguir. “Tu ejercicio depende de tu fuerza, querida mía”, dijo, “y tu comida algo en ...Dijo que vinimos aquí únicamente por mi cuenta, que iba a tener un descanso perfecto y todo el aire que pudiera conseguir. “Tu ejercicio depende de tu fuerza, querida mía”, dijo, “y tu comida algo en tu apetito; pero el aire puedes absorber todo el tiempo”. Entonces tomamos la guardería, en lo alto de la casa. Y el querido Juan me recogió en sus brazos, y simplemente me llevó arriba y me acostó en la cama, y se sentó a mi lado y me leyó hasta que me cansó la cabeza.