Las fauces se destacaron especialmente por su imagen en mosaico de un perro, completa con la advertencia “Cave canem”, o, más o menos, “Cuidado con el perro”. Las fauces llevaron al huésped al atrio y...Las fauces se destacaron especialmente por su imagen en mosaico de un perro, completa con la advertencia “Cave canem”, o, más o menos, “Cuidado con el perro”. Las fauces llevaron al huésped al atrio y al tablinum, que dividía el frente público de la casa desde la parte trasera privada de la casa, donde se ubicaban un pequeño peristilo y un triclinio al fresco.