Si tienes una superficie en la mano, puedes encontrar una versión homeomórfica de la superficie sobre la que construir geometría hiperbólica, geometría elíptica o geometría euclidiana. Y la elección d...Si tienes una superficie en la mano, puedes encontrar una versión homeomórfica de la superficie sobre la que construir geometría hiperbólica, geometría elíptica o geometría euclidiana. Y la elección de la geometría es única: Ninguna superficie admite más de una de estas geometrías. Como veremos, de las infinitamente muchas superficies, todas menos cuatro admiten geometría hiperbólica (dos admiten geometría euclidiana y dos admiten geometría elíptica).