5.5: Observaciones finales

No hay duda de que la agricultura, la silvicultura y los desarrollos de infraestructura, los principales impulsores de la pérdida y fragmentación del hábitat, juegan un papel importante en el desarrollo socioeconómico en África. Sin embargo, muchos (quizás la mayoría) de estos desarrollos se establecen para beneficiar a unas pocas personas y corporaciones seleccionadas principalmente interesadas en ganancias a corto plazo en lugar de una amplia gama de actores a largo plazo. Para mantener la biodiversidad y mejorar nuestra calidad de vida, los gobiernos de toda la región deben garantizar que los beneficios del desarrollo se compartan de manera justa en toda la sociedad y que las industrias sean responsables de su parte justa de los recursos naturales que utilizan (Sección 4.5.3). Además, el creciente número de personas adineradas de la región que más se benefician del desarrollo debe reevaluar sus estilos de vida (ya sea voluntariamente o a través de intervenciones gubernamentales, como la tributación) para evitar patrones de consumo excesivos. Algunos de los primeros pasos pueden ser relativamente fáciles. Por ejemplo, el agua utilizada para producir los alimentos desperdiciados del África subsahariana, un tercio completo de todos los alimentos producidos (FAO, 2013), equivale a la descarga anual del poderoso río Zambezi donde ingresa al Océano Índico en Mozambique (Beilfuss y dos Santos, 2001). Al mismo tiempo, todos debemos desempeñar nuestra parte en el logro del desarrollo sustentable, fomentando las actividades de planificación familiar y ayudando a las industrias a crecer de manera responsable (Sección 15.1). Al descuidar eso, comprometemos nuestro propio futuro, y el de nuestros hijos.

Resumen

1. Una de las principales amenazas para la biodiversidad hoy en día es la pérdida de hábitat y la fragmentación del hábitat. Muchas especies que viven en bosques tropicales, ecosistemas de agua dulce, el medio marino y las tierras secas estacionales están en riesgo de extinción debido a la pérdida de hábitat.
2. La teoría de la biogeografía isleña y la relación especie-área se pueden utilizar para predecir el número de especies que se extinguirán debido a la pérdida de hábitat. Ambas teorías predicen que los grandes parches de hábitat son más capaces de mantener las poblaciones de vida silvestre porque acomodan a las poblaciones mejor protegidas contra la extinción.
3. La fragmentación del hábitat describe el proceso cuando antes hábitats grandes y extendidos (y por lo tanto poblaciones de vida silvestre) se dividen en varias unidades cada vez más pequeñas y aisladas. Este proceso conduce a extinciones porque impide la dispersión, colonización, forrajeo y reproducción.
4. Los efectos de borde reducen el tamaño funcional de los hábitats porque alteran los microclimas y exponen a los especialistas del hábitat al desplazamiento por especies invasoras, depredadores y otras perturbaciones.
5. La pérdida y fragmentación del hábitat tienen sus raíces en la expansión de las poblaciones humanas y el consumo excesivo de recursos naturales. La ecuación >IPAT ilustra cómo el tamaño de la población, la riqueza y la tecnología juntos determinan nuestro impacto en el medio ambiente.