4.0: Introducción

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La probabilidad es el estudio de la incertidumbre. Esto puede parecer un esfuerzo desesperado, algo así como conocer lo incognoscible, pero no lo es. El estudio de la probabilidad nos da herramientas para domar el mundo incierto en el que vivimos y programamos, y para razonarlo de manera precisa y útil.

Puede que no sepamos exactamente cuánto tiempo un visitante en particular está dispuesto a esperar a que nuestra página web se cargue en su navegador, pero podemos usar la probabilidad para estimar cuánto tráfico perderemos si esto lleva más tiempo que cierta duración promedio. Puede que no sepamos qué contraseñas específicas intentará un hacker mientras intenta romper nuestro protocolo de seguridad, pero podemos usar la probabilidad para estimar qué tan factible será este enfoque para él. Puede que no sepamos exactamente cuándo un determinado programa se quedará sin RAM y tendrá que intercambiar sus datos a la memoria virtual, pero podemos predecir con qué frecuencia es probable que esto ocurra —y cuán doloroso será para nosotros— dada una cierta carga del sistema y el comportamiento del usuario.

El truco es utilizar las herramientas que ya hemos construido —conjuntos, relaciones, funciones— para caracterizar y estructurar nuestras nociones de la probabilidad relativa de diversos resultados. Una vez que esos apuntalamientos estén asegurados, una capa de razonamiento deductivo nos ayudará a hacer un buen uso de esa información para comenzar a predecir el futuro.