2.2: ¿Quién Posee una Firma?

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Un propietario de una firma es alguien que tiene derecho a controlar la firma y el derecho a cualquier ganancia residual después de que la firma haya contratado sus gastos con sus proveedores, empleados, prestamistas y otras personas con las que tenga un acuerdo contractual. Estos dos derechos —control y reclamante residual sobre ingresos— están vinculados entre sí o se obtienen conjuntamente en una corporación y son la base fundamental de la propiedad. Hay costos, sin embargo, asociados a estos dos derechos. Por ejemplo, un costo clave con respecto al derecho a ganancias residuales es el tema del riesgo y la elección de estrategia de la empresa. Más unidades de negocio en una firma pueden llevar a una mayor diversificación, lo que puede reducir el riesgo siempre y cuando la correlación entre las ganancias en cada una de las unidades de negocio sea negativa o cercana a cero.

Para el derecho a controlar la firma, hay costos de controlar a los gerentes y costos de toma de decisiones colectivas. Vigilar las acciones de la dirección es difícil cuando hay muchos propietarios, como suele ser el caso de las cooperativas y mutuas. Los propietarios pueden asegurarse de que se lleven a cabo auditorías externas y se implementen controles internos. Además, intentan que el consejo de administración esté integrado por individuos con los mejores conocimientos posibles para monitorear la gestión. Como se ve en el siguiente capítulo, las cooperativas son limitadas en este sentido porque sus directores deben provenir de miembros. Los costos de la toma de decisiones colectivas pueden ser elevados si los propietarios tienen opiniones divergentes derivadas de diferentes necesidades con respecto a los productos y servicios de la cooperativa. Cuanto mayores sean estas diferencias, mayores serán los costos de la toma de decisiones colectivas.