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15.2: Fraude en Salud

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    6 propinas a estafas: no caigas en estafas de fraude de salud

    ¡Producto ficticio! ¡Peligro! ¡Alerta de fraude en salud!

    Nunca verás estas advertencias en los productos de salud, pero eso es lo que deberías pensar cuando veas afirmaciones como “cura milagrosa”, “avance científico revolucionario” o “alternativa a las drogas o la cirugía”.

    Las estafas de fraude de salud han existido durante cientos de años. Los vendedores de aceite de serpiente de antaño se han convertido en los engañosos vendedores de alta tecnología de hoy en día. Se aprovechan de los deseos de las personas de encontrar soluciones fáciles a problemas de salud difíciles, desde perder peso hasta curar enfermedades graves como el cáncer.

    Según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), un producto de salud es fraudulento si se promueve engañosamente como efectivo contra una enfermedad o condición de salud pero no se ha demostrado científicamente que sea seguro y efectivo para ese propósito.

    Los estafadores promueven sus productos a través de periódicos, revistas, infomerciales de televisión y ciberespacio. Puedes encontrar estafas de fraude de salud en tiendas minoristas y en innumerables sitios web, en anuncios emergentes y spam, y en sitios de redes sociales como Facebook y Twitter.

    YouTube: Estafas de fraude en salud (https://www.youtube.com/watch?v=KsPlwKbGxE8)

    No vale la pena el riesgo

    Las estafas de fraude de salud pueden hacer más que desperdiciar tu dinero. Pueden causar lesiones graves o incluso la muerte, dice Gary Coody, R.Ph., coordinador nacional de fraude en salud de la FDA. “El uso de tratamientos no probados puede retrasar la obtención de un diagnóstico potencialmente salvavidas y medicamentos que realmente funcionan. Además, los productos fraudulentos a veces contienen ingredientes de medicamentos ocultos que pueden ser dañinos cuando los consumidores los toman sin saberlo”.

    Los productos fraudulentos a menudo hacen reclamos relacionados con:

    • pérdida de peso
    • desempeño sexual
    • pérdida de memoria
    • enfermedades graves como cáncer, diabetes, enfermedades cardíacas, artritis y Alzheimer.

    Un problema omnipresente

    Los productos fraudulentos no solo no funcionarán, sino que podrían causar lesiones graves. En los últimos años, los laboratorios de la FDA han encontrado más de 100 productos para bajar de peso, comercializados ilegalmente como suplementos dietéticos, que contenían sibutramina, el ingrediente activo del medicamento recetado para bajar de peso Meridia. En 2010, Meridia fue retirada del mercado estadounidense luego de que estudios mostraron que se asoció con un mayor riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.

    Los productos fraudulentos comercializados como medicamentos o suplementos dietéticos no son las únicas estafas de salud en el mercado. La FDA encontró un dispositivo de fototerapia fraudulento y costoso con afirmaciones para curar la meningitis fúngica, el Alzheimer, el cáncer de piel, las conmociones cerebrales y muchas otras enfermedades no relacionadas. Generalmente, hacer declaraciones de salud sobre un dispositivo médico sin la autorización de la FDA o la aprobación del dispositivo es ilegal.

    “El fraude en la salud es un problema omnipresente”, dice Coody, “especialmente cuando los estafadores venden en línea. Es difícil localizar a los responsables. Cuando los encontremos y les digamos que sus productos son ilegales, algunos cerrarán su sitio web. Desafortunadamente, sin embargo, estos mismos productos pueden reaparecer más tarde en un sitio web diferente, y en ocasiones pueden reaparecer con un nombre diferente”.

    Avisos de fraude en la salud

    La FDA ofrece algunos consejos para ayudarlo a identificar estafas.

    • Un producto lo hace todo. Desconfiar de los productos que dicen curar una amplia gama de enfermedades. Una firma neoyorquina afirmó que sus productos comercializados como suplementos dietéticos podrían tratar o curar la demencia senil, la atrofia cerebral, la aterosclerosis, la disfunción renal, la gangrena, la depresión, la osteoartritis, la disuria y el cáncer de pulmón, cuello uterino y próstata. En octubre de 2012, a petición de la FDA, los alguaciles estadounidenses incautaron estos productos.
    • Testimonios personales. Historias de éxito, como “Curó mi diabetes” o “Mis tumores se han ido”, son fáciles de maquillar y no son un sustituto de la evidencia científica.
    • Correcciones rápidas. Pocas enfermedades o padecimientos se pueden tratar rápidamente, incluso con productos legítimos. Cuidado con el lenguaje como, “Pierde 30 libras en 30 días” o “elimina el cáncer de piel en días”.
    • “Todo natural. ” Algunas plantas que se encuentran en la naturaleza (como los hongos venenosos) pueden matar cuando se consumen. Además, la FDA ha encontrado numerosos productos promocionados como “todos naturales” pero que contienen dosis ocultas y peligrosamente altas de ingredientes de medicamentos recetados o incluso ingredientes artificiales activos no probados.
    • “Cura milagrosa”. Las alarmas deberían sonar cuando veas esta afirmación u otras similares como, “nuevo descubrimiento”, “avance científico” o “ingrediente secreto”. Si se descubriera una verdadera cura para una enfermedad grave, sería ampliamente reportada a través de los medios de comunicación y prescrita por profesionales de la salud, no enterrada en anuncios impresos, infomerciales de televisión o en sitios de Internet.
    • Teorías conspirativas. Declaraciones como “La industria farmacéutica y el gobierno están trabajando juntos para ocultar información sobre una cura milagrosa” siempre son falsas e infundadas. Estas declaraciones se utilizan para distraer a los consumidores de las preguntas obvias y de sentido común sobre la llamada cura milagrosa.

    Incluso con estos consejos, los productos de salud fraudulentos no siempre son fáciles de detectar. Si tienes la tentación de comprar un producto no probado o uno con reclamos cuestionables, consulta primero con tu médico u otro profesional de la salud.

    Colaboradores y Atribuciones

    Contenido de dominio público


    This page titled 15.2: Fraude en Salud is shared under a CC BY-SA license and was authored, remixed, and/or curated by Kelly Falcone.