A pesar de su objetivo último de beneficiar a la sociedad, históricamente se han pasado por alto los aspectos psicológicos de la cultura porque muchos elementos de la cultura no se pueden observar. Por ejemplo, la forma en que se aprenden los roles de género es un proceso cultural, así como la manera en que las personas piensan sobre su propio sentido del deber hacia sus familiares. Además, ha habido una sobrerrepresentación de investigaciones realizadas utilizando sujetos humanos de naciones occidentales, educadas, industrializadas, ricas y democráticas (WEIRD). Los hallazgos de la investigación en psicología que utilizan principalmente poblaciones W.E.I.R.D. a menudo se etiquetan como teorías universales que explican fenómenos psicológicos pero se aplican de manera incorrecta e inapropiada a otras culturas.
Los hallazgos de investigaciones recientes que revelan que las culturas difieren en muchas áreas, como el razonamiento lógico y los valores sociales, se han vuelto cada vez más difíciles de ignorar. Por ejemplo, muchos estudios han demostrado que estadounidenses, canadienses y europeos occidentales se basan en estrategias de razonamiento analítico, que separan objetos de sus contextos para explicar y predecir el comportamiento. Los psicólogos sociales se refieren al error de atribución fundamental o la tendencia a explicar el comportamiento de las personas en términos de rasgos de personalidad internos e inherentes más que consideraciones externas situacionales (por ejemplo, atribuir una instancia de comportamiento enojado a una personalidad enojada). Fuera de las culturas W.E.I.R.D., sin embargo, este fenómeno es menos prominente, ya que muchas poblaciones no W.E.I.R.D. tienden a prestar más atención al contexto en el que ocurre el comportamiento. Los asiáticos tienden a razonar holísticamente, por ejemplo, considerando el comportamiento de las personas en términos de su situación; la ira de alguien podría verse simplemente como resultado de un día irritante (Jones, 2010; Nisbet et al., 2005). Sin embargo, muchas teorías de larga data sobre cómo piensan los humanos se basan en la prominencia del pensamiento analítico (Heinrich, 2010).
Al estudiar solo poblaciones W.E.I.R.D., los psicólogos no dan cuenta de una cantidad sustancial de diversidad de la población global. La aplicación de los hallazgos de poblaciones W.E.I.R.D. a otras poblaciones puede conducir a un error de cálculo de las teorías psicológicas y puede obstaculizar las habilidades de los psicólogos para aislar características culturales fundamentales.
Un objetivo importante de la psicología cultural es que muchas y variadas culturas contribuyan a las teorías psicológicas básicas para corregir estas teorías para que sean más relevantes para las predicciones, descripciones y explicaciones de todos los comportamientos humanos, no solo los occidentales (Shweder & Levine, 1984).
