3.S: Cerebros, cuerpos y comportamiento (Resumen)

Todo comportamiento humano, pensamientos y sentimientos son producidos por las acciones de nuestros cerebros, nervios, músculos y glándulas.

El cuerpo está controlado por el sistema nervioso, que consiste en el sistema nervioso central (SNC) y el sistema nervioso periférico (SNP) y el sistema endocrino, que se compone de glándulas que crean y controlan las hormonas.

Las neuronas son las células del sistema nervioso. Las neuronas están compuestas por un soma que contiene el núcleo de la célula; una dendrita que recoge información de otras células y envía la información al soma; y una larga fibra segmentada, conocida como el axón, que transmite información lejos del cuerpo celular hacia otras neuronas y a los músculos y glándulas.

El sistema nervioso opera mediante un proceso electroquímico. Una carga eléctrica se mueve a través de la propia neurona, y los químicos se utilizan para transmitir información entre neuronas. Dentro de la neurona, la carga eléctrica se produce en forma de un potencial de acción. El potencial de acción opera de una manera de todo o nada.

Las neuronas están separadas por áreas de unión conocidas como sinapsis. Los neurotransmisores viajan a través del espacio sináptico entre el botón terminal de una neurona y las dendritas de otras neuronas, donde se unen a las dendritas en las neuronas vecinas. Más de 100 sustancias químicas producidas en el cuerpo han sido identificadas como neurotransmisores, y estas sustancias tienen un efecto amplio y profundo sobre la emoción, la cognición y el comportamiento.

Los fármacos que podemos ingerir pueden imitar (agonistas) o bloquear (antagonistas) las operaciones de los neurotransmisores.

Los cerebros de todos los animales están estratificados, y generalmente son bastante similares en su forma general.

El tronco encefálico es la región más antigua e interna del cerebro. Controla las funciones más básicas de la vida, incluyendo la respiración, la atención y las respuestas motoras. El tronco encefálico incluye la médula, los pones y la formación reticular.

Por encima del tronco encefálico se encuentran otras partes del cerebro viejo involucradas en el procesamiento del comportamiento y las emociones, incluyendo el tálamo, el cerebelo y el sistema límbico. El sistema límbico incluye la amígdala, el hipotálamo y el hipocampo.

La corteza cerebral contiene alrededor de 20 mil millones de células nerviosas y 300 billones de conexiones sinápticas, y está respaldada por miles de millones de células gliales más que rodean y se unen a las neuronas. La corteza cerebral se divide en dos hemisferios, y cada hemisferio se divide en cuatro lóbulos, cada uno separado por pliegues conocidos como fisuras.

El lóbulo frontal es el principal responsable del pensamiento, la planeación, la memoria y el juicio. El lóbulo parietal es responsable de procesar la información sobre el tacto. El lóbulo occipital procesa la información visual, y el lóbulo temporal es responsable de la audición y el lenguaje. La corteza también incluye la corteza motora, la corteza somatosensorial, la corteza visual, la corteza auditiva y las áreas de asociación.

El cerebro puede desarrollar nuevas neuronas, un proceso conocido como neurogénesis, así como nuevas vías para las comunicaciones neuronales (neuroplasticidad).

Los psicólogos estudian el cerebro mediante abordajes de cadáveres y lesiones, así como a través de técnicas de neuroimagen que incluyen electroencefalografía (EEG), resonancia magnética funcional (fMRI) y estimulación magnética transcraneal (TMS).

Las neuronas sensoriales (aferentes) transportan información de los receptores sensoriales, mientras que las neuronas motoras (eferentes) transmiten información a los músculos y glándulas. Las interneuronas, con mucho la más común de las neuronas, se encuentran principalmente dentro del SNC y son responsables de comunicarse entre las neuronas.

El sistema nervioso periférico se divide en dos subsistemas, uno que controla las respuestas internas (el sistema nervioso autónomo, ANS) y otro que controla las respuestas externas (el sistema nervioso somático). La división simpática de la ANS está involucrada en la preparación del cuerpo para el comportamiento activando los órganos y las glándulas en el sistema endocrino. La división parasimpática de la ANS tiende a calmar el cuerpo al ralentizar el corazón y la respiración y al permitir que el cuerpo se recupere de las actividades que provoca el sistema simpático.

Las glándulas en el sistema endocrino incluyen la glándula pituitaria, el páncreas, las glándulas suprarrenales y las glándulas sexuales masculinas y femeninas. La hormona sexual masculina testosterona y las hormonas sexuales femeninas estrógeno y progesterona juegan un papel importante en el comportamiento y contribuyen a las diferencias de género.