Peso Cerebral
El cerebro es alrededor del 75 por ciento de su peso adulto a los dos años de edad. A los 6 años, es aproximadamente el 95 por ciento de su peso adulto. La mielinización y el desarrollo de dendritas continúan ocurriendo en la corteza y como lo hace, vemos un cambio correspondiente en las habilidades del niño. Un desarrollo significativo en la corteza prefrontal (el área del cerebro detrás de la frente que nos ayuda a pensar, elaborar estrategias y controlar la emoción) hace que sea cada vez más posible controlar los arrebatos emocionales y comprender cómo jugar. Considera a los niños de 4 o 5 años y cómo podrían abordar un juego de fútbol. Lo más probable es que cada movimiento sea una respuesta a los comandos de un entrenador parado cerca llamando: “¡Corre de esta manera! Ahora, detente. Mira la pelota. ¡Patea la pelota!” Y cuando al niño no le están diciendo qué hacer, ¡es probable que esté mirando el trébol en el suelo o un perro al otro lado de la barda! Comprender el juego, pensar en el futuro, coordinar el movimiento y manejar la pérdida mejoran con la práctica y la mielinación.7
Vías visuales
Los dibujos infantiles son representativos del desarrollo de vías visuales; a medida que los cerebros de los niños maduran las imágenes en sus dibujos cambian. Los primeros garabatos y puntos ilustran el uso de habilidades motoras simples. No se establece una conexión real entre una imagen que se visualiza y lo que se crea en papel.
A los 3 años, el niño comienza a dibujar criaturas tenuzas con cabezas y no mucho otro detalle. Poco a poco las imágenes comienzan a tener más detalle e incorporan más partes del cuerpo. Los brotes de los brazos se convierten en brazos y las caras toman narices, labios y eventualmente pestañas.
Crecimiento en los Hemisferios y Corpus Calloso
Entre los 3 y 6 años, el hemisferio izquierdo del cerebro crece dramáticamente. Este lado del cerebro o hemisferio suele estar involucrado en las habilidades del lenguaje. El hemisferio derecho continúa creciendo a lo largo de la primera infancia y está involucrado en tareas que requieren habilidades espaciales como reconocer formas y patrones. El cuerpo calloso que conecta los dos hemisferios del cerebro experimenta un brote de crecimiento entre los 3 y 6 años y resulta en una mejor coordinación entre las tareas del hemisferio derecho e izquierdo.